Mallorquinas

Las mallorquinas imponen su estilo sobre la fachada principal. Gracias a las diversas combinaciones posibles de formas, superficies, colores, lamas y paneles se pueden realizar proyectos personalizados cumpliendo con las más diversas exigencias arquitectónicas.

Con las mallorquinas se puede controlar la entrada de luz y el nivel de sombra, así como regular las vistas al exterior deseadas. Además las mallorquinas actúan como una protección adicional contra robos y por lo tanto nos hacen sentir más seguros en casa cuando están cerradas.

Si las mallorquinas se encuentran cerradas, no solo aumentan el aislamiento acústico sino también favorecen el ahorro energético tanto en verano como en invierno, protegiendo el interior de la casa del frío y del excesivo calor sin transmitir las oscilaciones de temperaturas a la ventana, garantizan un buen aislamiento térmico durante todo el año.

Se fabrican a medida, por lo tanto, es idónea para la renovación de viejas contraventanas de madera y aluminio.

Las fabricamos con lama móvil o fija, abatibles hacia fuera o correderas que se esconden tras la pared, y en una amplia gama de colores.